Desde los años 1905, 1906 y 1907, los letrados instalados en la ciudad de Puno, trataron en repetidas oportunidades de lograr ante el Supremo Gobierno el reconocimiento para la fundación del Colegio de Abogados de Puno. Esta gestión comenzó a realizarla el Dr. Juan Domingo Cortés Garnica, que desembocó en una primera Junta Directiva, cuyos integrantes no ha sido posible determinar.
El 23 de abril de 1909 se llevó a cabo una sesión basada en la Ley del 10 de noviembre de 1893, con la concurrencia de los letrados: Isaac Deza, Félix Ramos, Juan M. San Martín, Severiano Bezada, Pedro Flores, José Antonio Ramírez Aguayo, Segundo B. Núñez, Adrián Solórzano, N. Wenceslao Delgado, Rogelio Valdivia Chipoco, Pablo Ernesto Crespo, Félix M. Mejía, Miguel de la Riva Loza, Máximo Bello, Wenceslao Villar, Francisco Chuquihuanca Ayulo, José Antonio Cáceres y Andrés Miguel Cáceres, adhiriéndose al acuerdo de constituir el Colegio de Abogados José Antonio Bueno, Manuel A. Buoroncle, Federico Morales, M. Ignacio Frisancho y José Elías Barriga.
En dicha sesión de instalación se acordó pedir al Supremo Gobierno la autorización correspondiente conforme a la citada Ley, conformándose la siguiente Junta Directiva:
Decano: Dr. Facundo Molina.
Diputado: Dr. Isaac Deza.
Diputado: Dr. José A. Ramírez Aguayo.
Diputado: Dr. Andrés Miguel Cáceres.
Diputado: Dr. Segundo B. Núñez.
Director de Conferencia: Dr. Jesús García Maldonado.
Síndico: Dr. Wenceslao Delgado.
Tesorero: Dr. Pablo E. Crespo.
Secretario: Dr. Adrián Solórzano.
A esta Junta Directiva se le encomendó, asimismo, convocar y presidir las demás sesiones preliminares hasta la instalación solemne de la Orden. Entre sus gestiones cabe resaltar el logro que el Gobierno Central dictara la Resolución Suprema de 12 de febrero de 1910 por el que se autoriza la fundación del Colegio de Abogados.
Posteriormente, el 9 de abril de 1910 se organizó una sesión preparativa para la instalación del Colegio de Abogados, bajo la presidencia del Dr. Isaac Deza, con la concurrencia de los colegas: Andrés Miguel Cáceres, Félix Ramos, José Antonio Ramírez Aguayo, Manuel A. Bouroncle, Wenceslao Villar, Manuel Alberto Záa, Segundo B. Núñez, Manuel de la Riva Loza, Francisco Chuquihuanca Ayulo, Adrián Solórzano, M. Ignacio Frisancho, Pablo E. Crespo, J. Zúñiga Béjar y J. Antonio Cáceres, habiéndose dado lectura al oficio del Director General de Justicia, Instrucción y Culto, transcriptorio de la Resolución Suprema de 12 de febrero de 1910.
El presidente manifestó que se había convocado a esta sesión para elegir a los directivos, acordándose que la votación se hiciera para Decano en una cédula, en otra los cuatro diputados y los demás cargos separadamente, obteniéndose el siguiente resultado: para Decano Dr. Isaac Deza, 13 votos; José A. Ramírez Ayulo 1; Manuel A. Bouroncle, 1. Para Diputados: Dr. José A. Ramírez Aguayo, 14 votos; Andrés M. Cáceres, 14 votos; Segundo B. Núñez, 11; Félix Ramos, 10 votos; Manuel A. Bouroncle, 4 votos; Miguel de la Riva Loza, 3 votos; Adrián Solórzano, 1; J. Mariano San Martín, 1; Wenceslao Delgado, 1; Wenceslao Villar, 1. Para Director de Conferencias: Adrián Solórzano, 12 votos; Wenceslao Delgado, 1; Miguel de la Riva Loza, 1; J. Elías Barriga, 1. Para Síndico: Francisco Chuquihuanca Ayulo, 8; José A. Cáceres, 1; M. Ignacio Frisancho, 1; Wenceslao Villar, 1; Wenceslao Delgado, 1; M. A. Bouroncle, 1; Máximo Bello, 1. Para Tesorero: Pablo E. Crespo, 9; Wenceslao Villar, 2; Jacinto Zúñiga Béjar, 2; José A. Cáceres, 1; M. Ignacio Frisancho, 1. Para Secretario: M. Ignacio Frisancho, 10; José A. Cáceres, 2; M. Wenceslao Delgado, 1; Miguel de la Riva Loza, 1; Wenceslao Villar, 1. En consecuencia, quedó proclamado el siguiente cuadro directivo:
Decano: Dr Isaac Deza.
Diputados: Dres. Félix Ramos, José Antonio Ramírez Aguayo, Andrés Miguel Cáceres y Segundo B. Núñez.
Director de Conferencia: Dr. Adrián Solórzano.
Síndico: Dr. Francisco Chuquihuanca Ayulo.
Tesorero: Dr. Pablo E. Crespo.
Secretario: Dr. M. Ignacio Frisancho.
Por otro lado, se designó como presidente honorario del Colegio de Abogados al Dr. Manuel Francisco Landaeta. En seguida se acordó celebrar la sesión solemne de inauguración el domingo 24 de abril.
Es así que el 24 de abril de 1910, en sesión solemne, se instaló la primera Junta Directiva del Ilustre Colegio de Abogados de Puno, autorizada por Resolución Suprema del 12 de febrero de 1910, abriéndose sesión a las tres de la tarde, bajo la presidencia del señor Prefecto del Departamento de Puno Fabio Aquiles Rubina, con las asistencia del Obispo de Puno Valentín Ampuero, el Director del Glorioso Colegio San Carlos Horacio Urteaga y distinguidas personalidades, la casi totalidad de miembros del Poder Judicial, auxiliares de justicia, abogados y ciudadanía en general.
Después de leída el acta de la sesión anterior que fue aprobada sin modificaciones, se dio cuenta del oficio del Director General de Justicia, Instrucción y Culto, transcripción de la Resolución Suprema de 12 de febrero de 1910.
El Decano Dr. Isaac Deza en su discurso inaugural señaló el camino que debe seguir el Colegio de Abogados de Puno, en tal ocasión dijo: “La necesidad de su organización ha sido generalmente sentida desde la creación del Tribunal Superior en este departamento, como institución complementaria para la formación de los profesionales en el estudio y la práctica del Derecho”. Igualmente, el Diputado Andrés Cáceres y el Director de Conferencias Adrián Solórzano, pronunciaron elocuentes y patrióticos discursos con motivo de los amagos de guerra con que amenazaba el Ecuador.
Finalmente el Prefecto declaró instalada la nueva Junta Directiva del Colegio de Abogados.
La segunda ocasión fue la velada literaria del 26 de agosto de 1910 realizada en el Colegio San Carlos, con el concurso de los docentes de dicho centro, en homenaje a los excursionistas universitarios de Lima y Arequipa, en la que el Dr. Solórzano disertó sobre las causas étnicas y psíquicas de la postración.
La Junta Directiva ese año tuvo cuatro sesiones y fueron inscritos en orden de antigüedad los siguientes abogados: Federico Morales (abogado boliviano que se desempeñaba en el Consulado en Puno), Facundo Molina, Pedro Flores, Félix Ramos, Isaac Deza, José A. Ramírez A., Jesús García Maldonado, Manuel A. Bouroncle, Andrés M. Cáceres, Indalecio Díaz, Juan M. San Martín, Segundo B. Núñez, Adrián Solórzano, J. Elías Barriga, M. Wenceslao Delgado, Rogelio Valdivia Ch., Severiano Bezada, Félix M. Mejía, Miguel de la Riva Loza, Máximo Bello, M. Alberto Záa, M. Ignacio Frisancho, Wenceslao Villar, Pablo E. Crespo, José A. Cáceres, J. Zúñiga Béjar, F. Chuquihuanca Ayulo, José Frisancho y Edmundo Gutiérrez (abogado colombiano).
El 4 de octubre de 1911 se renovó la Junta Directiva, reduciéndose a dos el número de diputados y se agregó el cargo de secretario, siendo nuestros representantes:
Decano: Dr. Isaac Deza.
Diputado 1ro: Dr. José Antonio Ramírez Aguayo.
Diputado 2do: Dr. Andrés Miguel Cáceres.
Síndico: Dr. J. Elías Barriga.
Director de Conferencia: Dr. Adrián Solórzano.
Tesorero: Dr. José Antonio Cáceres.
Secretario: Dr. Félix Mejía.
Pro-Secretario: Dr. J.M. De la Fuente.
Se dieron diversas circunstancias que impidieron la renovación de los cargos, hasta que la sensible desaparición del nuestro Decano Dr. Isaac Deza, acaecido el 14 de noviembre de 1914, obligó de manera imprescindible a que se realizará la renovación de la Junta Directiva, la que se acordó en la sesión del 21 de diciembre de 1914, que fue presidida por el señor diputado Dr. José Antonio Ramírez Aguayo y practicada en la sesión de Junta General del 26 de diciembre de 1914, nombrándose como Decano del Colegio al Dr. Andrés Miguel Cáceres, hasta el 30 de marzo de 1916.
Es importante señalar que el Dr. Cáceres protagonizó una amplia labor y por primera vez publica su memoria, donde se consignan importantes datos de la naciente institución, asimismo se discutió y aprobó el primer Estatuto que reguló la marcha del Colegio de Abogados por muchos años.
Esta breve semblanza de los momentos fundacionales de nuestra Orden, que seguramente debe completarse con un trabajo de investigación sobre la historia de nuestro Colegio, está basada en el “Álbum de Oro. Monografía del departamento de Puno”, tomo XV de Samuel Frisancho Pineda, publicado en 1994.